Es sencillo, mientras los fabricantes de armas requieran de mercados para sus productos, habrá guerras en el mundo.
Entonces, cuál es el papel de los organismos que propenden por la paz? Se puede asegurar que ninguno puesto que quienes eligen presidentes, fuerzan por su conveniencia, allí,. la vida no tiene valor pues nada puede estar por encima de los intereses comerciales .
El fabricante de armas elige, protege al gobernante, él es su garantía para el mercantilismo despiadado que adolece de sentimiento, de razones para priorizar la existencia humana.
Qué se habría que proponer, la clausura de las fábricas de armas en el mundo? Una utopía, pues la naturaleza del hombre de pretender ejercer sobre los demás, hace a tal propuesta totalmente inviable, hasta convertirla en ridícula.
El interés económico todo lo vuelve inviable; la realidad, la violencia, representada en las guerras, en las grandes matanzas, habrán de ser el desagradable compañero del hombre mientras exista la humanidad.