Ese bipartidismo que se estableció en Colombia a partir de 1958 a través del plebiscito convocado por la junta militar que se constituyó al producirse el derrocamiento de Rojas Pinilla, se puede asegurar que sigue vigente, cuando atomizados dirigentes liberales y conservadores, procedieron abrir toldas por separado, pero manteniendo el " cordón umbilical" que posibilitó su origen, el manejo del poder.
Igual a lo que ocurre con el paramilitarismo , cuando después del montaje de un gobierno para su "desmovilización" en facciones con distintas denominaciones pero cuya esencia sigue siendo la misma, actuar con el apoyo subrepticio del estamento oficial, se observa en cada nuevo partido que hoy se hace aparecer ante la opinión nacional como el " cambio radical" que se aplicó en su estructura filosófica para presentarlos como diferentes a los tradicionales partidos liberal y conservador.
En consecuencia, hoy advertimos un sinnúmero de vertientes que se disputan lo burocrático para el mejor manejo de presupuestos y contratos que nos llenan de nuevos y ostentosos millonarios.
A partir del asesinato de Gaitán, en Colombia se ha hecho dificil, tal como quedó demostrado con la exterminación del partido comunista, la Unión Patriótica, dirigentes diversos, etc., el pensar y actuar diferente. Al colom biano medio se le atemoriza, se le cerca, para que, así sea disfrazados con sonoros nombres, el rancio liberalismo y conservatismo, sigan en el manejo amañado de una nación cuyo avance en lo social es dictado por el interés particular.
Cuando nuestro pueblo acuda a las urnas pensando diferente, en no dejarse arrastrar por los falsos ofrecimientos, Colombia, realmente podrá vislumbrar el cambio que en silencio se pretende. Seguir señalando a los políticos como los responsables de la crisis que se observa en la salud, la educación, infraestructura, etc., solo nos conduce a mayores frustraciones. Usted tiene el poder, atrévase a pensar,actuar.
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