Sembrar el odio político es una actividad que requiere dedicación, inclusive, horas de desvelo para elucubrar, trazar planes, entre ellos, hallar las personas indicadas que actúen como aliadas, buscar los medios de divulgación y finalmente, emprender la tarea, haciendo énfasis en lo que se persigue.
Colombia siente con todo su rigor ese tipo de actitud que busca básicamente mantener dividido al país entre los que ingenuamente caen en las maquinaciones, y aquellos que si entienden lo que hace el gobierno en procura de lograr la paz que no vive la nación desde hace más de cinco décadas.
Hay quienes consideran a ese tipo de personajes como los mayores perturbadores con que jamás se haya contado en Colombia.
Su principal gestor ha podido obtener comprobados beneficios económicos y políticos, por lo que con su oposición ha logrado reunir a un buen número de quienes siguen viendo en la guerra el más expedito modo de vida.
Para nadie es un secreto que en Colombia muchos de los grandes capitales que hoy exhiben " prestigiosas" familias, han tenido su origen en la violencia que sacude a la nación desde el vil asesinato del líder politico Jorge Eliécer Gaitán. Y son parte de esas familias las que continúan incentivando el conflicto armado.
Pero hay quienes desvían sus miradas hacia el presidente Santos al considerar que le ha faltado entereza de carácter para poner en su cabal sitio a quien pretende ejercer, argumentando el derecho a la protesta, un cogbierno desde la oposición.
La debilidad del presidente ha sido utilizada por los opositores para llevarlo a revertir medidas de su gobierno anunciadas para facilitar los diálogos de paz, con lo cual se asesta golpes que afectan su credibilidad.
Cada fracaso del presidente es saludado con alb orozo por esos enemigos de la nación que han sabido sacarle grandes ventajas a sus indecisiones. Algunos aseguran que Santos ahora, aparece con gesto enérgico anunciando una determinada acción y a las horas, los de la oposición, lo hacen desinflar. Entonces? Más determinación presidente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario